El periodismo se parece cada vez más al borracho de la barra del bar, añorando un pasado que no volverá y pidiendo una ronda más para olvidar su presente. Las reuniones con los colegas se han convertido en funerales donde se homenajea a los últimos caídos en las redacciones –10.000 en los últimos cuatro años– y se recuerdan con nostalgia tiempos mejores. Tampoco ayuda la sensación de que, al igual que ha ocurrido con la banca o la casta política, muchos de los que agravaron la crisis de sus empresas siguen en sus puestos, mientras firman los despidos de quienes se limitaron a aplicar su falta de visión.
Pero he aquí que algo extraordinario está sucediendo. En mitad de la crisis, cuando la profesión vive su momento más precario, los desahuciados del periodismo se han rebelado. Si despides a un buen profesional, lo más probable es que termine haciéndote la competencia. Si lo envías a la cola del INEM a recoger el subsidio, en lugar de a escribir de la crisis, cogerá el dinero y creará un periódico en Internet. Si pagas indignamente su talento, o incluso pretendes llevártelo gratis, encontrará otro lugar donde respeten su trabajo.
Y así estamos viendo como fotógrafos a los que nadie cogía el teléfono en España están recibiendo los premios más prestigiosos y publicando en los mejores medios extranjeros. Reporteros a los que nadie dio una oportunidad están cubriendo conflictos para agencias y diarios internacionales. Nuevos periódicos y revistas están siendo creados, confirmando una de las grandes contradicciones del oficio: los despidos, las dificultades y la falta de recursos, lejos de acallar voces, las han multiplicado. Nunca antes habían surgido tantos proyectos interesantes y nunca sus promotores -casi siempre periodistas- contaron con tanto talento donde elegir. No todos los proyectos sobrevivirán. No todos merecerán hacerlo. Y seguramente algunos caerán sin merecerlo. Pero el atrevimiento de tantos a presentarse ante los lectores justo ahora, cuando todo parece desmoronarse, debería servir al menos para pedir que pare la marcha fúnebre y se lleven las coronas de flores. El periodismo no ha muerto. Está empezando.
Mucho optimismo me parece, David. Y eso te lo dice un optimista incorregible. Ex periodista también. Aunque el que fue puta, lo sigue siendo siempre.
Cuando la crisis aprieta, la imaginación se pone en marcha. El papel ya no es lo que era y, simplemente, se trata de mirar el futuro con confianza. Internet abre las puertas a todo el mundo, ya no nos pueden cerrar la boca, ahora bien, es preciso ser flexible con el cambio de paradigmas que estamos viviendo y amoldarnos a lo que hay. ¡Nadie te puede quitar lo que ya eres!
Buen periodista o mal periodista, cuenta cómo le va al Sistema. Son lacayos del Sistema que buscan satisfacciones y reconocimientos proporcionalmente a la agilidad de su pluma y de su verbo. No quieren cambiar el mundo, sólo pretenden denunciar lo que en él funciona bajo sus criterios de forma inadecuada. Siempre estarán más cerca del poder que en los suburbios del mismo por muy corresponsales de guerra o de desgracias que sean. La juventud que a mí más me esperanza es la que no se doblega frente a las mal llamadas democracias, ni ante el poder, ni ante las oligarquías y eligen una posición de lucha y combate en todas sus variedades. Los paradigmas sociales son injustos y erróneos y el periodista sólo los regurgita una y otra vez.
[…] Los desahuciados del periodismo […]
Nuevos digitales han surgido pero la mayoría de sus contenidos son opinativos y no informativos (que no sean de agencias), tal es mi impresión.
Si quitamos la política, los deportes y los espectáculos ¿qué buena información ofrecen? Me refiero a la económica, a la científica…
Si además tenemos en cuenta que las nuevas generaciones de españolitos cada vez están peor formados y desprecian un mínimo esfuerzo intelectual (leer un artículo un poco prolijo)… el futuro es negrísimo para vuestra profesión aunque la economía española vuelva a la senda del crecimiento en un futuro (2018 en adelante).
Tal es la cruda realidad.
Gracias a Internet se puede acceder a la narracion de hechos. La opinion te la puedes formar. Yo hace muchos meses deje de leer los periodicos y de ver los noticieros tradicionales porque en ellos solo hay medias verdades. Ademas lo mas lamentable es que los periodistas se equivocan al creer que su oficio es emitir su opinion y «actuar» dependiendo de los intereses que se muevan. No se si eso se vea en Espana. Pero en otras latitudes ni hablar.
Si los medios son el cuarto poder ya luce como cualquiera de los primeros tres poderes.
Al menos con el quinto poder es evidente que a los «afamados» periodista poco les comen cuento.
Habra que ver como evoluciona. Sin embargo, yo soy muy optimista siempre encuentro algo bueno.
Yo también hace años que dejé de comprar periódicos (y leerlos) habitualmente. Lo mismo con los informativos de la televisión y la radio, aunque de estos aun veo o escucho alguno.
Mi problema no era que contaran medias verdades sino que, en mi opinión, deformaban las verdades y como consecuencia deformaban la realidad a base de tanta opinión dirigida.
Lo que no tengo ni idea es de si es un caso específico de España, yo pensaba que ocurría lo mismo en todos los países de nuestro entorno.
Tienes toda la razón.. Puedes leer por ejemplo el «Ara» de Cataluña y después «LIbertad Digital» de internet… La misma noticia cambia completamente… no sólo el enfoque.. realmente parece que los hechos se han producido de manera diferente según dónde lo leas. Eso no es informar, es dar opinión.. Y para eso, ya existen los blogs o las columnas específicas.
Pues mira yo vivi en Colombia y alla es igual. Luego se encuentra el periodista que quiere ser heroe trayendo historias que podrian partirle a uno el corazon. Solo que al final esas terribles historias son una cadena de malas decisiones de las «supuestas victimas». La gente debe ser responsable de su propia vida y no cargarle a otros los problemas que ha creado.
Hace unos dias lei una de esas columnas que instan a que la gente «debe preocuparse de la esclavitud actual, por ejemplo en los paises de Europa del Este» pues si a eso se llama propuesta pues cada uno puede juzgar. La periodista indica que ella uso varios esclavos, porque por ejemplo esta usando un pintalabios que podria contender Mano de obra de esclavos!!!! A mi parece que es un escrito de relleno y sin fondo.
Se habra preguntado esa periodista si esas personas que trabajan haciendo estarian en peor condicion sin ese medio de sobrevivencia? o si el productor subiera los salarios, el producto ya no pudiera venderse y dejar, en consecuencia mas desemplo? La gente tiene que ocuparse de solucionar su vida y vivirla lo mejor que pueda.
Ahora vivo en Esrados Unidos y ni hablar con honrosas excepciones, los medios son progobierno, inundando de imbecilidades los noticieros y haciendo la vista gorda a los asuntos importantes y delicados. La fortuna es que aqui el periodismo de blog y de Internet es realmente muy activo con alto nivel de critica. Yo creo que va a resultar haciendo gran diferencia.
Es un casi similar a que antes los escritores estaban sometidos a que NY Times diga que su libro es «dazzling» -previo pago publicitario- y etc. pero la gente que es la que al final si lee el libro dice si le gusto o no y punto. Me alegra mucho que exista por ejemplo sitios como «godreads.com» porque ahi muchas veces la calificacion con una estrella puede mover me a comprar un libro».
Totalmente de acuerdo. En España solo he tendo la posibilidad de trabajar como becaria en El Mundo. Ahora trabajo como reportera para un periodico escoces. En España despiden a los periodistas, fuera de España quieren periodistas, da igual su nacionalidad.
Pagaremos lo de los becarios con creces,ya lo dije hace años que trabajar gratis es de locos.
Interesante reflexión, David, más si cabe cuando la corriente parece ser rasgarnos las vestiduras y lamentarnos por lo mal que está la profesión. Comparto tu esperanza aunque recelo en parte de que sea la necesidad, antes que las ganas de plantar cara a un sistema caduco, la que gane en esa re-definición necesaria. Habrá que seguir bregando!! ;)
A ver si lo que le esta sucediendo al periodismo, según comentas, se le contagia al resto de actividades en España. Ojalá!
Ya va siendo de que el periodismo español haga lo que debió hacer hace una década: mirar con humildad -repito: con humildad, sin altanerías ni miradas neocoloniales- hacia América Latina y tratar de imitar y mejorar lo mucho y bueno que acá se está haciendo.
esteee, escribir, seguro, pero tu has intentado leer alguna vez algún diario «latino» de «acá»-Sudacalándia?…