El lector cabreado
Días después de que El Mundo estrenara su portada en formato sábana para la edición de los domingos, en septiembre de 2015, recibí la carta de un lector cabreado. El sobre contenía la primera página hecha trizas y un breve comentario sobre los cambios: “Vuelvan ustedes a ser un periódico serio”. Recibí la misma carta de protesta, sin remitente y con la portada [...]